El pasado martes 18 de agosto empezó el día con una buena fideuà que elaboró el gran Tony Aguilar. Tras la sobremesa, en la que no faltó ni pasteles ni café, y mientras conversabamos degustamos unos "oportunos" mojitos. Ya por la noche, estuvimos junto a Natalia Olmo en su "Mar Salà" aunque para "salà" ella. Fue un placer enorme conversar e interpretar para ella "no soy el culpable". Besitos Natalia.